Hoy no es jueves, pero el día jueves -especialmente- me llevó a hoy... cada día dejamos de ser lo que fuimos, el cambio constante de la vida la hace interesante. Hoy, es domingo, en la tradición cristiana domingo de resurrección que buena analogía para mi situación actual por cierto. El jueves casi muero asfixiada por pasar un trozo muy grande de comida. Heme aquí, tengo la oportunidad de contar que he redescubierto que soy muy solitaria ¡y me gusta!.
El jueves comenzó una aventura que bueno... ya acabó, lo fugaz a veces es trascendental. Mi aventura comenzó con undestino al cual me hice, una vez allí contemplé que la belleza es infinita, como la inspiración que proviene de ella, curiosamente descubrí que donde esperaba encontrar belleza no encontré más que banalidad, frivolidad, vacuidad... así es la vida, siempre tiene algo que nos decepciona y como contrapeso algo más allá que nos asombra.
La vista rojiza del corazón a veces es más acertada que la nítida de la razón, porque puede ver a través de la carne lo intangible sea bello O NO.
¿Cuál es el primer deber del hombre? La respuesta es muy breve: ser uno mismo.
Henrik Johan Ibsen |