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jueves, 20 de junio de 2013

Para liberarnos

Esa muralla, llamada conciencia, crece muy alto cuando está cerca la tentación, y está cerca porque siempre algo falta... sujetas el cigarrillo con tus labios y tiemblas, esta vez, tienes más razones para caer en el vicio de nuevo. Y mientras el humo sale de tu nariz, guardas silencio aunque una sonrisa medio irónica lo diga todo.

No deberías fumar, no es sano para cantar, tú cuando cantas, dices mucho más de lo que puedan formar las palabras... de seguro no querrás perder ese privilegio, y cuando sueñas, recreas anhelos semiocultos... Sí "semi", y cuando te contienes descubres la debilidad de tu piel frente a la suya.

La pasión y la luna llena son aliadas, y tú eres el contendiente... que espera la estocada final, pero ten presente que hasta ahora la luna que nos ilumina eestá en cuarto creciente... y ella te con ciertas ganas de perder el asalto, por ese deseo discreto de perder la apuesta, tú sabes bien lo que está en juego.

Trata de usar la imaginación y pasa tus uñas sobre tu pecho... imagínale entregando de sí su frenesí, imagínale mordiendo sus labios y mirándote con firmeza, eres dueño de ese mundo producto de la deshinibición, crea y cree en ese momento de euforia... antes de que te traiga de nuevo a la realidad.

Tal vez el vino ayude un poco a resaltar tus pupilas, para que atrapes en ellas esa mirada que añoras en un maldito y condenado misterio... 

No te alejes, a no ser que quieras asirte a su figura, convertirte en adicto a ella y hacer creer a todos, cuando vuelva tu juicio que nada ha pasado.

lunes, 17 de junio de 2013

Renunciando a la magia

En estos momentos de mi vida, me pregunto, si acaso tanto fantasear me ha privado de llevar las cosas a la realidad, Quizá... todas las enseñanzas de la TV dirigidas a la masa, dieron frutos en muchas de mis aspiraciones, como la de encontrar un príncipe azul o alguien ideal, y poco a poco mi concepto de soledad se vio manchado por el consumismo, ahora resulta que no quiero estar sola.


Quiero que me tomen en cuenta, y sentirme querida, y pensar que mi vida puede ser una imagen tibia como la de las películas, con besos y atardeceres, y mientras tanto, hay quienes muy conscientes de esta realidad van aprovechándose de los incautos soñadores, que terminan siendo marionetas de cualquier show, efímero y falaz...

-Como dice mi libro favorito "Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción; y el mayor bien es pequeño; que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son" ... 


Pero cómo saber si sueño, si dentro de todo lo que es siento, pienso y vivo pero al tiempo siento que no pertenezco a ningún lugar, porque el peso de ser diferente, es tal... que te hundes en un mundo del cual nadie hace parte.. no puedo estar tan lejos de la humanidad porque soy una de ellos, pero no una entre ellos... porque es fácil soplar esperando dar vida al viento y pensar en ello, porque esas ilusiones son las que te mantienen vivo... o con ganas de vivir (que no es lo mismo)

Día a día, intento ser feliz, y en mi empeño noto, que con todo lo que he sido siempre, se me frustran los deseos porque dentro llevo desesperación, temor y tristeza, cosas que nunca se van, que son parte de mi... porque huí tanto de ellas que les di un poder que se equipara a mi voluntad, y me escondo, y me lamento, entre mi mente y entre lo que mis ojos ven, mis pasos, mi voz... me conectan con este plano, y sé quien soy.

Quisiera decirle a alguien que entendiese, lo amargo que es sentirse excluido de un mundo al que tienes que enfrentar... pero quién podría escucharme sin importarle nada más... quisiera una segunda opinión, porque siempre soy yo, en el espejo, en la oscuridad quien se escucha, quien se aconseja... pero soy mala en eso... y en lo otro también

Bondad, amor... VERDAD, eso quisiera, en vez de estar con la mirada en cualquier lugar pensando en absurdas ilusiones que sostienen mi vida desperdiciada... ya no tengo nada que decir... que sea real.

sábado, 8 de junio de 2013

Shower Time!

Su sangre estaba embarrada por todo mi cuerpo, antes de deshacerme de su andrajosa figura decidí tomar una ducha. Entré bajo el chorro, cerré mis ojos mientras sentía la tibieza del agua, sacudí mi cabeza, y luego, abrí los ojos, me quedé anonadada, pues con mi cabello, había salpicado ese color rojizo mezcla de agua y sangre por todos lados.

Sólo podía reírme al saberle inexistente en este mundo dentro del cual algún día se creyó alguien, aunque en teoría estaba ocupando espacio, espacio bastante próximo al mío... a veces las personas toman pésimas decisiones. Me pregunto cómo es que con todo lo que pasa, las personas siguen creyendo en tantas sandeces, hay que superar los miedos, y muchas personas he conocido que le temen a cosas tan desprovistas de importancia como el pasado... el pasado no importa sino es el plano de nuestro presente, porque las construcciones de nuestra existencia pueden cambiar día a día, todo es cuestión de determinación.

La vida se puede escapar, casi de la nada, por cualquier impulso, y luego hay quienes finalizan en la chimenea de algún maniático (como yo, eso si me permiten los honores) haciendo parte del flogisto y del polvo, polvo sin rumbo. En estas cosas es mejor no fingir, así que, es mejor decirlo, sí, es placentero ver cómo alguien soberbio se deshace de una manera tan vil, no puedo negar mi naturaleza errante, y consecuentemente humana, ¡adelante! pueden juzgar, no sería la primera vez.

Total... nunca me ha importado lo que piense nadie, y así, he pasado muchos años en soledad, soledad que agradezco, porque me ha hecho ser este alguien que adoro, y que pocas veces elogio, y sabiendo lo que soy y lo que siento respecto a la masa, no me arrepiento de ser una cuasi enajenada.

Respecto al baño, fue purificador, luego salí a terminar lo que empecé... y terminé en el baño otra vez



lunes, 3 de junio de 2013

junio 02 de 2013

Así son las historias amargas en ocasiones muestran todo lo que un niño quiere ver para sonreir,   un inicio formidable y nos muestran sueños… pero las verdaderas lágrimas, y la sangre, el dolor y la desesperación no salen con alta resolución porque no brindan el engaño de la felicidad, ni el drama de la melancolía, tan sólo muestran la sórdida realidad de lo que significa vivir cada día… la vida es sorpresiva, y el mundo, cuando quieres evitarlo se vuelve pequeño, en algún lugar muy lejos… yo sé que si muero, alguien morirá al otro lado, a la misma hora… y entonces sabré que como siempre estaré sola, aunque la vida pueda parecer mágica, las ilusiones son tan solo eso.

Al final todos somos iguales, estamos hechos de lo mismo y tenemos el mismo destino, sólo hay que andar y andar para ver qué sucede, andar en medio de todos, en medio del mundo y seguir, como sea, hasta el fin.


Ojala nadie sepa, mi devenir, porque sé que tendré como resultado, los frutos de este incesante arado… tal como lo dicen los grandes sembradores y su magnífico sentido de la predicción. Ya verán todos lo poco que siempre me importó lo que esperasen de mí, porque al final siempre fui yo, esa que en tantas ocasiones molestó por ser así, así y no de la forma esperada… 

sábado, 1 de junio de 2013

y... el sielncio de la madrugada

Su aire llegaba hasta mi rostro, era un vaivén sin igual que no quería dejar de inhalar, estábamos a centímetros uno del otro, pero sin poder tocarnos, algunos ojos cerrados habían, que quizá,  podrían haber visto lo que no debería ser visto. Con sus pies, rozaba los míos, y en la mitad de la noche tal vez confundiéndome con alguien más, me sujetó por la camisa y me asió a su pecho, intentaba controlar mi respiración, pues ésta se precipitó al pasmo absoluto.

Estaba oscuro, y mis pupilas oscurecieron mis ojos más que un eclipse lunar oscurece un bosque frío, y su blanca piel con todo, brillaba. Puso su mano sobre mi cintura, su liviana mano, estremeció mi cabeza y un parpadeo largo fue ideal para fingir que yo dormía, me pregunto ¿acaso estabas durmiendo?...

Al amanecer, mi espalda estaba ceñida a su pecho, y sus brazos me rodeaban, yo no estaba durmiendo pero quería seguir soñando… mi respiración otra vez, irregular, delatora y torpe. Yo sé que se percató de mi despertar, pues sin dejar sus brazos de lado, volteé mi cuerpo para mirar su rostro, y lo contemplé.


No sé cuando, me miró a los ojos, y su mirada me dijo lo que quería oír, pero como casi siempre no lo que queremos resulta ser lo que es.